Irlanda y la emigración fiscal.



Las empresas también emigran ¿sabes por qué?.


Muchas empresas que tenían su domicilio en España están llevando sus capitales a otros países.  Al principio eran las multinacionales de la tecnología, la moda, los muebles o la alimentación. Ahora han entrado en esta práctica las PYME´s buscando una rebaja en sus impuestos.
El país preferido por las empresas para este menester es Irlanda al tener uno de los impuestos de sociedades más bajo de toda la Unión Europea. Este impuesto grava el beneficio con un 12,5%, e incluso cuando se encuentran afincadas en la zona franca del aeropuesto de Shannon, o en el International Financial Services Centre sólo se tributa al 10%. La diferencia con el tipo de gravamen más común de nuestro país es notable (30%). 

Técnicas de opción fiscal.
De ahí que exista una técnica bien conocida que consiste en crear dos empresas en el país del trébol y una en la piel de toro. 
Las empresas creadas en Irlanda operan entre ellas, porque una produce y otra exporta. De manera que ese beneficio (que es la mayoría) tributa a un tipo impositivo de sólo un 12,5%. La empresa irlandesa exportadora vende a la empresa española que se encargará de distribuir el producto o servicio en nuestro país. Al ser esta última una mera intermediaria produce unas ganancias menores, que tributarán al tipo de gravamen español (30%). 

Consecuencias para España.
Esta técnica y otras de opción fiscal, sobre todo operaciones entre grupos consolidados, hacen que la economía española vea mermadas sus arcas tributarias, suponiendo un descenso paulatino de nuestros recursos. Por este motivo, si realmente queremos solucionar la gran hemorragia económica de nuestro país, hay que apostar por firmas socialmente responsables, y preferiblemente de nuestro entorno más cercano.
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