Del paro al abordaje por sotavento.

La propuesta de pagar el rescate, primero a la banca y ahora al empleo precario, demuestra que el Gobierno tiene las manos atadas en economía. Esta incapacidad será financiada con el esfuerzo fiscal de los contribuyentes y la rebaja en las condiciones laborales de los trabajadores. La oposición se prepara para recoger el beneficio del desastre, mientras los trabajadores son convocados, para una marcha educada, el 12-D.

Reforma a la alemana con el paro creciente.
La idea de la reforma “a la alemana”, que los agentes sociales y el gobierno están barajando,no es un método de reforma “a la francesa”, es decir recortar el tiempo de trabajo para repartirlo y crear empleo. Muy al contrario, esta medida sólo sirve para reducir costes a las empresas, a cambio de que no destruyan más puestos de trabajo.
Pero en tal caso,¿Cómo garantizarían impedir más despidos?. Las cifras de desempleo conocidas hoy no alientan la buena fe. Las zonas mediterráneas (Cataluña, Levante, Baleares y Málaga) han vuelto a ser castigadas con un aumento de despidos, y el paro se sitúa ya en casi 3,9 millones de personas.
El asunto es que esta estrategia de conservación de empleos invita a la picaresca, al tiempo que por cada hora menos de trabajo, el INEM asumirá el coste de un porcentaje del pago de la nómina, probablemente un 70%.

Efectos de la reforma.
Esta reforma laboral empobrecerá, aún más, a los trabajadores. Si un trabajador antes cobraba 10 euros la hora y se recorta una hora diaria, esto supone que frente a los 1760 euros mensuales, ahora sólo cobrará 1694 euros. Una remuneración compuesta de la parte empresarial (1540 euros) y la parte estatal (154 €). Como se puede apreciar, el trabajador pierde 66 euros cada mes. Además, tendrá una base de cotización más baja y al tiempo, tendrá una incidencia fiscal negativa.
Esto último, se debe a que, al recibir el salario de dos pagadores los límites para no declarar se rebajan, además de la ausencia de retenciones por el organismo público.

El contribuyente paga la economía sumergida.
En definitiva, están pactando que todos los contribuyentes tengamos que sostener una parte del salario de los trabajadores en activo, que seguro dedicarán, de manera sumergida, al trabajo extra. No en valde, la asociación GESTHA ha cuantificado el fraude total en 240.000 millones de euros. Andalucía participa en un 14% del fraude nacional, siendo las provincias con más dinero negro las de Sevilla, Málaga y Cádiz. Esto es, que el coste del ERE temporal generalizado, lo soportarán los mismos de siempre: los trabajadores.

Comentarios