España se moviliza por la democracia.

España vivió ayer, a una semana de las elecciones, una jornada de participación política y social como nunca antes se había visto. Desde la universidad y desde la red se convocó una marcha para pedir una democracia real y denunciar los recortes antisociales.
Podrán disfrazarlo como quieran, pero los medios han tenido que hacerse eco de la noticia, ante la avanlancha de informaciones que se daban en las redes sociales.

Los ciudadanos demostraron ayer su mayoría de edad. Saben que los gobiernos (el nacional y los autonómicos) son los capataces de la banca y las grandes empresas. Están hartos de corruptos que no pagan por sus delitos y de que nos dejen decidir sólo una vez cada cuatro años.
Cincuenta ciudades, cientos de miles de ciudadanos. Las cifras hablan por sí solas. La juventud de hoy abre la esperanza a la lucha por las libertades. Porque cuando les dejan sin casa, sin trabajo y sin pensión, también les dejan sin miedo.